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Somos lo que cazamos, recolectamos y cultivamos
Primeros intentos de vida hortícola en las llanuras
(2000-1000 años antes del presente)
En esta etapa las condiciones hidro-climáticas fueron muy variables, con déficit hídrico al comienzo y hacia 1000 años antes del presente más húmedas, similares a las actuales. Este mejoramiento coincide con un cambio permanente en las formas de obtener y procesar los recursos vegetales, que no modificará drásticamente el modo en el que vivían las poblaciones.
Este cambio se relaciona con la incorporación paulatina de vegetales cultivados tales como porotos, maíces o zapallos. Se continúan consumiendo frutos silvestres y aves acuáticas como biguás, flamencos, cisnes, jotes, gansos y patos, así como peces de ríos de agua dulce.
Sitios arqueológicos estudiados en este período y variaciones en el tamaño de la laguna
- Colonia Muller (1585 +- 14C antes del presente)
- El Diquecito
Este modo de vida se conoce como de economía mixta, en el que se complementan la caza y recolección con la horticultura.
En este período aumentan las lesiones óseas vinculadas con actividades de carga o traslado de objetos, y también derivadas de la locomoción. Es posible que se trasladaran en procura de recursos que su propia región no les brindaba, particularmente en momentos de déficit hídrico, y también intercambiaran objetos y saberes con otras poblaciones asentadas en torno a otras materias primas tales como cuarzo, ópalo, piedra sapo, piedras volcánicas o moluscos.
Algunas personas poseen deformaciones artificiales del cráneo, más aplanada la parte posterior, que difieren en su forma de las más antiguas.
¿Cómo lo sabemos?
Para conocer cuáles pueden haber sido los recursos alimenticios consumidos, se han hecho análisis de isótopos estables del carbono 13 y del nitrógeno 15, que permiten estimar el tipo de fotosíntesis que tenían los vegetales. También se han estudiado los microrestos vegetales contenidos en el sarro dental. El relevamiento de ciertas patologías orales, tales como caries, desgaste y cálculos dentales, permiten estimar qué tipo de productos pueden haber sido consumidos por estas poblaciones.
La arqueomalacología permite estudiar los moluscos en contextos arqueológicos.
Las historias que cuentan los ancestros en primera persona
La Viajera
Fue enterrada hace 1900 años en posición decúbito ventral, con los miembros inferiores hiperflexionados, posiblemente sujetos con algún lazo o tela, los miembros superiores extendidos al costado del cuerpo. Su cuerpo fue orientado en sentido Este- Oeste. De su ajuar se conservó una almeja nacarada (almeja de río), colocada sobre su cadera. Este ejemplar no habría vivido en esta región, sino en los ríos de la cuenca del Paraná.
Su cráneo presenta una deformación artificial plana en la región occipital, generada en su niñez, relacionada con su identidad social. El sarro y las lesiones dentales se deben a la falta de higiene. El desgaste dental que posee fue producido por el consumo de alimentos duros y fibrosos, tanto silvestres o cultivados, o por la forma de cocinarlos. Los surcos entre los dientes indican que usó su boca como tercera mano, para sostén o manipulación de fibras o tendones. Tuvo lesiones en sus brazos por esfuerzos repetitivos que generaron microtraumas o fracturas. La presencia de facetas extras en articulaciones de miembros inferiores, se produce por mantener por largos períodos la postura de cuclillas o arrodillada. Si bien los cambios degenerativos en la columna vertebral pueden deberse a su edad, la presencia de una hernia sugiere esfuerzos físicos en algún momento de su vida y seguramente le produjo dolor. Pudo haber sido zurda, o haber realizado alguna actividad física que demandó más esfuerzo en el brazo izquierdo. Murió entre los 43 y 55 años, y su estatura promedio fue de 1,62 m.
El Horticultor
Este hombre fue sepultado hace 1200 años por su comunidad en posición dorsal con las piernas dobladas y las rodillas elevadas. El brazo derecho se mantuvo al lado de su cuerpo, mientras el izquierdo se extendió formando un ángulo de 45 grados. Posee un linaje materno que es compartido con otro individuo de esta región que vivió hace 4500 años, lo cual evidencia la gran profundidad temporal de este linaje y su origen local y posterior dispersión al centro-oeste de la Argentina.
Si bien sufrió durante su niñez de algunos eventos de estrés (enfermedades o deficiencias en la alimentación), en general gozó de buena salud bucal. Seguramente consumió alimentos de menor dureza, o que fueron cocinados con otras técnicas, por ejemplo, de hervido. Comió vegetales cultivados como porotos. Diariamente adoptó posturas acuclilladas para realizar la molienda de granos o el trabajo artesanal, así como la vigilancia de animales para la caza. Fue probablemente diestro. Murió aproximadamente entre los 43 y 64 años, y su estatura promedio fue de 1,63 m.